Framik Rojas sobre el 30A: “No conozco a Leopoldo López, jamás lo he visto en persona”
Los acontecimientos del 30 de abril de 2019 siguen generando opiniones encontradas en Venezuela. En días pasados, publicamos una entrevista a Leopoldo López, coordinador de Voluntad Popular. En esta, López, al ser consultado sobre el 30 de abril, afirma que: “Moreno había negociado abiertamente con sectores del gobierno interino y del gobierno americano, a través de una persona se llamaba Framik Rojas, una sentencia que iba a salir y que ya estaba redactada”.
Framik Rojas, quién hasta el 2018 se desempeñó como abogado asistente del Tribunal Supremo de Justicia, se comunicó con el equipo de Politiks y solicitó un derecho a réplica.
A continuación, la respuesta de Rojas a la entrevista de Leopoldo López.
¿Qué opina de las declaraciones de Leopoldo López sobre su participación en el 30 de abril de 2019?
No conozco a Leopoldo López y tampoco lo he visto en persona, solo sé que es una figura pública que hoy representa el pasado de una clase política en decadencia. No he tenido algún tipo de comunicación con él o con interpuestas personas, pero no es extraño que el Sr. López de manera deliberada e irresponsable dé declaraciones que distan de la realidad. Los venezolanos, por muchos años, hemos sido espectadores de sus acciones y observado una conducta patológica que ha llevado al país a los peores escenarios de violencia que haya vivido Venezuela en las dos últimas décadas.
Hay que preguntarse por qué la figura de Leopoldo López siempre ha estado vinculada a actos que han llevado, incluso, a la pérdida de vidas humanas, solo por su capricho y su complejo mesiánico de creerse ungido por una gracia divina para acceder al poder. López ni siquiera conoce la estructura del Estado, apenas llegó a dirigir un pequeño municipio capitalino y elitesco, donde jamás lidió con las verdaderas necesidades sociales del país. Eso sin mencionar su pasado donde ha sido señalado de actos de corrupción, al usar recursos de PDVSA para financiar su impulso político en Primero Justicia, luego en la Alcaldía de Chacao para crear Voluntad Popular y últimamente con la empresa Monómeros para toda su campaña internacional.
Ahora, Leopoldo López aparece señalando mi nombre, para lavar su absurda irresponsabilidad de una aventura golpista que podía haber generado otra situación de tragedia en el país.
¿Participó usted en los hechos del 30 de abril de 2019?
No, y tampoco Maikel Moreno me pidió que negociara con López o con el gobierno de los EE.UU. Trabajé en el Tribunal Supremo unos años y luego decidí voluntariamente renunciar en febrero del 2018, es decir, ni siquiera tenía contacto directo con el Magistrado para el año 2019. Sólo en una oportunidad estos señores quisieron que yo sirviera de puente, como lo hicieron muchas veces otros políticos tanto de oposición como del gobierno. Ya estaba acostumbrado a oír historias de fábulas cuando trabajé en el TSJ, y le restaba importancia, aunque no llegué a imaginar que un puñado disminuido de militares pudieran hacerle comparsa a Leopoldo López. De todas maneras, hay que ser muy iluso para tramar una aventura golpista y creer que un papel (sentencia) puede cambiar un gobierno.
Estoy formado laboral y académicamente en el Derecho, y aún cuando parte de la comunidad internacional cuestiona la legitimidad del gobierno de Maduro, Venezuela cuenta con un orden constitucional que permite sólo la transferencia del poder mediante elecciones democráticas, salvo las excepciones de ley, que sólo se producen bajo un estricto y riguroso proceso jurídico e institucional, el resto no es más que habitar en la profunda ignorancia. Es un cuento que ellos mismos crearon, utilizando la figura de Maikel Moreno, expresidente del Tribunal Supremo de Justicia, para hacerle ver al gobierno americano que tenían control para un supuesto alzamiento “institucional”. Eso les bastó para conseguir un chivo expiatorio y lo entregaron a los EE.UU para librar sus culpas.
¿Negoció con el gobierno americano o con sectores del gobierno interino la redacción de la sentencia?
Créame que conozco muy bien la Ley. Fui Asesor Parlamentario, Defensor Público, Fiscal y además Abogado del Tribunal Supremo de Justicia. Es absurdo que se redacte una sentencia descabellada y que además le haga ver a un gobierno que puede tener peso jurídico para cambiar a otro gobierno. Recuerdo muy bien las declaraciones ese día de John Bolton desde Washington. Cuando vi eso, me preguntaba cómo era que altos funcionarios de la administración de Trump, pudieron dejarse llevar por el histrionismo de Leopoldo López. Estoy convencido que, a la postre, el gobierno de los EE.UU. debió haberse sentido muy decepcionado y engañado. Cabe la pregunta de cómo un solo integrante del Tribunal Supremo de Justicia podía proferir una sentencia de esa magnitud, al menos debía contar con el respaldo de la mayoría de los integrantes de la Sala Plena o en el peor de los casos de la Sala Constitucional, instancia judicial a la que jamás perteneció Moreno.
EE.UU., en los últimos meses, ha venido comprendiendo la realidad del país y eso se traduce en el acercamiento con los que detentan el poder y un apoyo condicionado a las fuerzas opositoras, que ahora viven bajo el fantasma de la deslegitimación por su política improvisada y errada.
¿Cómo califica usted los hechos del 30 de abril de 2019?
No fue más que una escaramuza, un episodio surrealista que dejó al descubierto las carencias y la poca capacidad de un grupo político. Podía haberse salido de control si verdaderamente habrían tenido apoyo de las fuerzas militares, pero eso nunca pasó, y ellos lo sabían, porque todo fue orquestado por Leopoldo López para fugarse, a él no le importaba más que eso.
Hizo ese día (y a su mejor estilo) un show como los de siempre para erigirse como la principal figura opositora del país, algo que fue perdiendo con el tiempo y necesitaba con urgencia volver al escenario político. Engatusaron a unos pocos como el General Cristopher, sólo para complementar un episodio de su eterna novela.
Creo que tanto el gobierno como la oposición han querido darle a esos acontecimientos una dimensión que nunca tuvo, y como ya es costumbre, no fue más que otro acto desatinado de la oposición que decepcionó y los alejó más del apoyo popular. Les invade la falta de criterio y adolecen de la seriedad y altura que se requiere para encarnar un verdadero liderazgo.
¿Tiene algún comentario adicional o tema que no le haya preguntado que quiera agregar o comentar?
Hay que luchar para que el país transite por un verdadero camino de reconciliación nacional. Los bandos políticos deben empezar a dejar a un lado el egoísmo y sus intereses personales. Por una parte, el gobierno sólo se limita a preservar el poder y, por el otro lado, la oposición a no perder el poco espacio de confianza que le queda. Son bandos fatigados que nada tienen que aportar. Son solo una imagen de la corrupción, y el país requiere de dirigentes honestos que les duela la patria. Le han hecho un profundo daño a nuestra sociedad y se olvidaron de las necesidades de un pueblo qué hay que admirar, porque en sus más profundas dificultades, muchos están regados por el mundo forjando un futuro con creatividad y trabajo y los que se han quedado, vienen impulsando una sociedad productiva y alejada de aquel rentismo en el que nos sumió la clase política.
Hoy la referencia del país es su propia gente y no los dirigentes, que siguen sin interpretar las verdaderas necesidades y queriendo tomar atajos que solo conducen a la hostilidad y la violencia. Hay que aprender de Colombia, que acaba de elegir a un presidente, que desde hace largo tiempo asumió que la mejor forma de servir a un pueblo es caminando por las reglas infalibles de la democracia.