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Uno de los mayores dramas que vive la ciudad de Valencia, tanto en el norte como en el sur, es la escasez de espacios recreacionales de escala metropolitana que se encuentren en condiciones de buena calidad.

Si bien un habitante de Valencia podría decir que el Parque Fernando Peñalver es un parque de escala metropolitana que se encuentra en buenas condiciones, lo cierto es que, en cuanto a estándares internacionales, el parque deja mucho que desear. La vegetación del parque no recibe los cuidados necesarios para mantenerse viva y húmeda, el mobiliario del parque se encuentra deteriorado, los equipamientos internos no gozan de una planificación de eventos públicos ni de un mantenimiento adecuado y la quebrada del río Cabriales que atraviesa el parque se encuentra en unas condiciones sanitarias realmente deplorables.

Fotografía de niños bañándose en aguas contaminadas del Río Cabriales[1]

Por otro lado, el morocho del Fernando Peñalver, el Parque Humboldt, se encuentra en condiciones aún más lamentables, sin un manto vegetal que recubre sus jardines, sin mobiliario urbano, sin equipamientos; se ha convertido en algo más parecido a un desierto, que en un espacio recreativo de proporciones metropolitanas. Estos parques, unidos por la principal arteria hidrográfica de la ciudad, —El Río Cabriales—, y separados por el capricho de quienes alguna vez planificaron y gobernaron valencia, necesitan de un tratamiento especial, que pueda recuperar los espacios recreacionales, devolverle condiciones sanitarias adecuadas y además establecer una dinámica de encuentro ciudadano que se vuelva tradición y símbolo de la ciudad.

Quizás el lector podría preguntarse, ¿Qué relevancia tiene esto con la desigualdad social de la ciudad? Lo cierto es que, la accesibilidad a espacios verdes y recreacionales de calidad es una necesidad para los ciudadanos de cualquier ciudad, no se puede disfrutar de la vida en una urbe, sin tener espacios públicos adecuados para el disfrute y la recreación. A lo anterior, se le añade un problema y es que, debido a la fragmentación urbana, la calidad de los espacios verdes recreacionales, a pesar de ser de propiedad pública y no distinguir entre ricos y pobres en teoría, en la práctica, varía en función del ingreso medio.

Lo anterior, explica por qué hay una diferencia sustancial en la calidad de las áreas del Parque Fernando Peñalver con las del Parque Humboldt y aún más con las del Parque Recreacional del Sur. A pesar de que los tres parques son de relevancia metropolitana, y pertenecen al mismo Municipio, a medida que los espacios del parque colidan con zona de menor ingreso medio, se va deteriorando su calidad, puesto que reciben menor inversión y cuidado, siendo entonces espacios que se convierten en nidos de delincuencia, e inseguridad.

Fotografía aérea tomada por la empresa Drone Valencia[2]

Entendiendo entonces el problema de desigualdad social manifiesto en los parques de escala metropolitana de la ciudad de Valencia, se debe realizar un proyecto de integración de las tres áreas recreativas que conforman el eje verde norte-sur de la ciudad.

Dicho proyecto debe incluir necesariamente un programa de saneamiento y tratamiento del Río Cabriales, el principal eje hidrográfico de la ciudad no puede seguir siendo la cloaca de los valencianos. El Río Cabriales debe pasar de recibir nuestras heces a recibir nuestro orgullo.

La transformación a través del saneamiento y la intervención sobre esta quebrada, debe llevarnos a construir espacios que aprovechen al máximo la vereda del río dándole tratamiento especial a los bordes urbanos de los parques.

En definitiva, debe ser un proyecto que integre de forma eficiente el río con la ciudad, y aproveche los espacios de la vereda con intervenciones que generen un alto nivel de viscosidad[3] y le de un giro de 180 grados al estado de los parques que rodean el río Cabriales.

En definitiva, no podemos permitir que los parques más importantes de nuestra ciudad se encuentran tan deteriorados, pues esto desmejora nuestra calidad de vida, necesitamos recuperarlos.

Foto del Parque Fernando Peñalver Antes[4]

Necesitamos un proyecto que involucre el saneamiento y tratamiento del río Cabriales y la integración de los tres parques metropolitanos, debe obligatoriamente considerar el tratamiento de los bordes urbanos que rodean el río y los parques a intervenir.

Los incipientes bordes de la autopista del este, y la Avenida Paseo Cabriales deben sufrir una transformación a través de un proceso de densificación de sus alturas e intensificación y mezcla de sus usos del suelo, lo que permitirá establecer unas dinámicas urbanas más intensas y propensas al uso de los espacios proyectados y rehabilitados.

Foto intervenida con propuesta. Fuente: Elaboración propia.

Sé que la imagen que muestro es ambiciosa, pero esta es la Valencia con la que sueño, debo necesariamente ser ambicioso. Consolidar un eje verde de semejantes proporciones, con la intensificación y mezcla de los usos del suelo y la densificación en los bordes del proyecto, sumado a la mejora en la accesibilidad que traerá el sistema de Transporte Público Masivo propuesto en el capítulo anterior, permitirá igualar el acceso a áreas verdes de calidad en toda la ciudad, generando espacios de encuentro que afiancen la cohesión social.

Estos proyectos, aunque costosos, tiene formas de financiarse, a través de las contribuciones por mejora que se adquieren al rezonificar los bordes de los parques y el río[5].

Las propiedades afectadas reciben un aumento en su valor de mercado, pues ahora las regulaciones urbanísticas las favorecen en cuanto a la altura de las edificaciones que se pueden construir, los usos del suelo que pueden implementar, y los equipamientos aledaños y la mejora de su localización.

[1] Blanco, Dayrí. «Crisis de agua en Carabobo. Niños se bañan en el Río Cabriales.» El Carabobeño, 13 de Noviembre de 2017.

[2] Drone Valencia. Twitter. 29 de Febrero de 2016. https://twitter.com/Drone_Valencia/status/704354570537975808/photo/1 (último acceso: 4 de Mayo de 2020).

[3] Concepto urbano acuñado por Cullen, Gordon. Paisaje Urbano. Barcelona: BLUME, 1981.

[4] Drone Valencia. Twitter. 11 de Febrero de 2016. https://twitter.com/Drone_Valencia/status/697788741700730880.

[5] La regulación en esta materia se establece en la Ley Orgánica de Ordenación del Territorio —Artículo 68— y en la Ley de Expropiación por Causa de Utilidad Pública o Social —Artículo 17 y 18—.

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