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El 16 de mayo, la Plataforma Unitaria hizo público un comunicado donde expresó que, antes del 31 de diciembre de 2023, se realizarán elecciones primarias para definir al candidato presidencial de la alternativa democrática para las elecciones presidenciales previstas para el año 2024.

A pesar de que se sabe poco sobre cuándo y como serán estas elecciones primarias, varios partidos y líderes políticos han comenzado sus campañas, recorriendo el país y divulgando su propaganda. Sin embargo, en la opinión pública sigue la idea de que las elecciones de 2024 no serán unas elecciones limpias, y que, a pesar de que la mayoría de las organizaciones políticas sostienen que debemos participar, para ganar esa elección hace falta más que simplemente “ser mayoría”.

Desde hace mucho tiempo en Venezuela no hay un proceso electoral democrático. Las primarias deben diseñarse en función de esa premisa. Es un error pensar que el proceso de las primarias tiene como único propósito, escoger por mayoría, al candidato de la alternativa democrática para dichas elecciones. Esto porque la plataforma unitaria enfrenta más retos que el de simplemente capturar la mayor intención de voto posible en las elecciones de 2024. La violencia sistemática, la persecución política, la censura de los medios de comunicación, y las divisiones internas, son solo algunos de los retos.

Es por lo anterior que, en mi opinión, las primarias de la plataforma unitaria, deben ser un mecanismo que tenga 4 objetivos fundamentales:

  1. Maximizar la representatividad del candidato de la alternativa democrática.
  2. Maximizar la capacidad de movilización antes, durante y después de la elección.
  3. Proteger la candidatura de la persecución política.
  4. Fortalecer la alianza unitaria.

Maximizar la representatividad del candidato de la alternativa democrática

Según el artículo 2 del reglamento marco para elegir por Primaria a la candidata o candidato presidencial unitario para las elecciones presidenciales de 2024, el mecanismo electoral que definirá al ganador de la elección será el de mayoría de votos. El elector manifiesta quién es el candidato que prefiere sobre todos los demás, y quién obtenga más manifestaciones (votos) es electo candidato. Simple.

Ese método está muy bien cuando la elección es entre 2 candidatos únicamente. Sin embargo, se queda corto cuando la elección es entre más de 2 candidatos, tal es el caso de la primaria de la Plataforma Unitaria. Ahora bien, ¿por qué se queda corto y cuál es la alternativa a este método de elección? Supongamos el siguiente ejemplo:

Tenemos 3 candidatos, César, Carlos y María. El 40% de los electores cree que César es mejor que Carlos, y que Carlos es mejor que María (Grupo 1). El 35% cree que María es mejor que Carlos, y que Carlos es mejor que César (Grupo 2). Por último, el 25% de los electores cree que Carlos es mejor que María, y que María es mejor que César (Grupo 3).

Grupo 1

Grupo 2

Grupo 3

40%

35%

25%

César

María

Carlos

Carlos

Carlos

María

María

César

César

Con el método de elección propuesto en el reglamento actual, el candidato de la plataforma unitaria sería César, con un 40% de los votos del grupo 1. Sin embargo, el 60% de los electores (Grupo 2 + grupo 3) cree que César es el peor de los 3 candidatos, lo cual pondría en riesgo sus posibilidades de ganar la elección de 2024, ya que ese 60% de electores podría desmovilizarse. Esto es porque, a pesar de que la regla de la mayoría beneficia a César, este sigue siendo un candidato poco representativo.

40% (1er lugar)

35% (2do lugar)

25% (3er lugar)

César

María

Carlos

Carlos

Carlos

María

María

César

César

Curiosamente, quien llegar en último lugar por la regla de la mayoría, Carlos, es quien es el candidato más representativo de las 3 opciones, ya que si el 35% que votó por María hubiese tenido que decidir entre César y Carlos, habría decidido por Carlos, sumando así 60% de los votos.

Los votos van para César

Los votos van para Carlos

Los votos van para Carlos

40%

35%

25%

César

María

Carlos

Carlos

Carlos

María

María

César

César

Del mismo modo, si quienes votaron por César (40%) tuviesen que decidir entre Carlos y María, habrían votado por Carlos, sumando así el 65% de los votos totales. En definitiva, en este escenario, Carlos en el candidato con menos rechazo de todas las opciones, y quien goza de la mayor representación dentro de los ciudadanos que participan.

De tal forma que, teniendo en cuenta la amplia cantidad de candidatos que tendrá la elección primaria de la plataforma unitaria, la mejor opción para escoger al candidato más representativo no es la de la mayoría simple, sino buscar un mecanismo electoral que logre seleccionar al candidato que mejor represente la voluntad de los ciudadanos.

La opción que yo propondría es el mecanismo de elección de Condorcet. En este mecanismo, los electores no votan a un candidato, sino que ranquean los candidatos según sus preferencias, y el candidato ganador es aquel que vence a todos los demás candidatos en un cara a cara según los rankings de los electores (como Carlos en el ejemplo anterior).

Maximizar la capacidad de movilización antes, durante y después de la elección

Sabemos que otro de los obstáculos que enfrentamos es el de mantenernos movilizados antes, durante y después de la elección de 2024. Es evidente que mientras más representativo es un candidato, mejores son sus opciones para movilizar a los ciudadanos. Es por ello por lo que el método de mayoría simple también pierde frente al método de elección de Condorcet. Mientras que por mayoría simple, solo el 40% de los ciudadanos se sentiría identificado con el candidato de la alternativa democrática, con el método de Condorcet, al menos el 60% estaría convencido de que se ha elegido al mejor candidato posible.

Proteger la candidatura de la persecución política

Por supuesto que otro de los obstáculos es la posibilidad real de que el candidato electo sea apresado o inhabilitado. Ante ello, el método de elección primaria debe garantizar los mejores reemplazos para el candidato, en dado caso de ser inhabilitado, puesto preso o exiliado. Con el método de Condorcet, se podría generar un ranking de los candidatos de mayor a menor representatividad, siendo esta la cadena de sucesión, en caso de que la persecución política del Estado llegase a tales niveles.

Fortalecer la alianza unitaria

Esa misma lista podría servir para que las organizaciones políticas, previo a la elección de 2024, generen un pacto de gobierno unitario, donde todas las organizaciones tengan una participación en ese gobierno, en función de lo representativas que son para los ciudadanos. Esto permitiría tener una propuesta de gobierno representativa, y, además, haciendo que todos los partidos tengan carne en el asador, se garantiza que participen activamente en la búsqueda de la victoria para el 2024.

En conclusión, el método de mayoría simple para escoger un candidato de la plataforma unitaria poco aporta para los retos que enfrenta la alternativa democrática ante las elecciones de 2024. Es necesario el diseño de mecanismos que logren capturar mejor las preferencias de los ciudadanos, su voluntad de movilizarse, proteger las candidaturas de la persecución política y fortalecer la unidad.

Ante ello, el método de elección de Condorcet, donde los ciudadanos manifestamos en nuestro voto un ranking de preferencias entre todos los candidatos que participan, pareciera ser una mejor opción de caras a enfrentar los retos de representatividad, movilización, persecución y unidad que se vislumbran para el 2024.

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